Autores:

Por: Toni Calvin, Xavier Cosano, Nil Aregall, Juanjo Medina y Jan Calpe

3. Conclusión

Como conclusión, podríamos resumir los apartados de la siguiente manera:

El romanticismo se sitúa en la segunda mitad del siglo XIX, y el inicio del movimiento se sitúa En Francia.


En general, se deja de lado las historias y leyendas y se centra más en el sentimentalismo y lo intimista. conducido por un movimiento alemán y el interés que se despierta sobre la poesía popular española. Los artistas sienten ansias de rebelión hacia la burguesía. Ven la sociedad de manera muy negra dónde absolutamente cada acción que se produce es con el simple objetivo de aparentar.


El teatro siguen siendo partícipe de la tendencia realista, tanto  en la estructura misma, dejando claro el significado de la obra, tanto la crítica a la sociedad, como la locura de ella. La poesía en cambio sigue tendencia romántica, pero con pequeñas intervenciones de realismo. Podríamos decir que la poesía posromántica es una transición entre el romanticismo y el realismo.


En general, las características de este movimiento literario sería, en general, que se rechaza la sociedad burguesa, y que es muy intimista. Su composición trataba de imitar la poesía popular y dominan el amor y la naturaleza, además de la brevedad.


Los autores más destacados son Gustavo Adolfo Bécquer, que su obra se basa en la temática del amor y el desamor, el dolor, la nostalgia. No utiliza recursos retóricos muy complejos, además su lírica no tiene unos esquemas métricos fijos.


En cuanto a Rosalía de Castro, se mueve entre una preocupación de tipo social su poesía proyectó un conjunto de magníficas visiones del paisaje gallego y esa sensibilidad fue la que transportó una concepción de la naturaleza como la de una realidad animada, misteriosa, que habla de una vida doliente.